Reem
05-28-2024, 07:50 PM
Con un Biden (https://aglitk.com/tags/joe-biden/)a la baja en la encuestas, el horizonte para los dem?cratas en las elecciones del pr?ximo noviembre, a pesar de que todav?a quedan meses y mucho espect?culo electoral por poner en escena, pinta un tanto oscuro. Por eso muchos liberales (lo que aqu? llamar?amos “progresistas”) y centristas americanos tienen depositadas sus esperanzas en el que es pr?cticamente el ?nico muro de contenci?n que, a estas alturas y con la inc?gnita de qué le suceder? al magnate y expresidente en los tribunales, podr?a frenar una nueva victoria de Donald Trump: s?, Taylor Swift (https://aglitk.com/tags/taylor-swift/).
Aunque durante la primera parte de su carrera Swift se declaraba apol?tica, todo cambi? para la cantante al mismo tiempo que lo hizo para tantas mujeres americanas: con la victoria de Trump en 2016. Abiertamente favorable al aborto y a las causas b?sicas del progresismo (igualdad de género, antirracismo, derechos LGTBIQ (https://aglitk.com/tags/lgtbiq/)+...), su primer posicionamiento pol?tico claro lleg? en 2018, cuando decidi? apoyar p?blicamente a los candidatos dem?cratas de su estado (Tennessee) en las elecciones de mitad de mandato. En 2020 ir?a un paso m?s all? al mostrar su apoyo a la candidatura de Joe Biden y prestar su canci?n Only the Young, en la que alude a los tiroteos en centros escolares y critica veladamente a Trump y los suyos, para que fuera utilizada en la campa?a dem?crata. La vicepresidente Kamala Harris le dio las gracias por los servicios prestados.
Hasta el momento, la todopoderosa Swift, ?nica mujer que ha sido dos veces portada de la revista Time como 'Persona del a?o' (en 2017 y 2023), no se ha manifestado en favor de ninguno de los candidatos u opciones pol?ticas que competir?n por la presidencia este 2024, aunque parece intuirse por d?nde podr?an ir los tiros. La cantante se ha limitado a animar a los estadounidenses a inscribirse para votar, lo que, en un pa?s en el que los republicanos luchan denodadamente en un importante n?mero de estados para dificultar el registro de votantes o poner en cuesti?n a muchos de los que ya est?n inscritos, pr?cticamente se podr?a considerar un pronunciamiento pol?tico.
De lo que no hay duda es de que los republicanos la temen. Mucho. Sus candidatos y su legi?n de tuiteros llevan meses tratando de demoler su figura y alimentando teor?as conspiranoicas como que la artista es un exponente de una especie de operaci?n de propaganda dise?ada desde el Pent?gono. Fue muy criticado desde ese lado el protagonismo que se le dio en la ?ltima Super Bowl, donde la cantante actu? mientras su actual pareja, Travis Kelce, era uno de los jugadores que compet?a en el campo. Que la que consideraban "novia de América" se hubiera juntado con una super estrella del f?tbol americano ten?a mucho de sue?o tornado en pesadilla para la América conservadora. Hasta el punto de que se lleg? a tachar su relaci?n de PRomance ('romance de relaciones p?blicas'), cuestionando incluso c?mo se hab?an conocido y si la artista hab?a dedicado el tiempo a hacer el duelo de su anterior pareja que esos sectores consideraban necesario. Horas antes del espect?culo, Donald Trump lleg? a pedir a la artista a traves de X (antes Twitter) que no se pronunciase a favor de Biden, record?ndole cu?nto dinero ésta le deb?a a la Ley de Modernizaci?n de la M?sica (https://aglitk.com/tags/musica/)aprobada bajo su mandato, que actualiz? y mejor? el régimen de ingresos por derechos de autor para los creadores.
Una bomba nuclear del consenso
Una de las claves que convierten a Swift en un arma poderosa a la hora de frenar la llegada de Trump a la Casa Blanca es su inmensa popularidad en EEUU, un abrumador consenso pocas veces visto antes. Seg?n un estudio de la firma Morning Consult que recog?a The Guardian, el 53% de los americanos se reconocen fans de la cantante, con un 16% declar?ndose ‘entusiastas’. Y eso que la encuesta se realiz? en marzo de 2023, antes de que arrancase el abrumador The Eras Tour que ahora llega a Madrid, pero que antes ha arrasado otros rincones del planeta, en particular EEUU, batiendo todos los récords de alcance en directo de un artista. Otro sondeo, este de la cadena NBC y realizado en noviembre del a?o pasado, concluy? que el 40% de los electores registrados en EEUU ten?an una visi?n positiva de Swift, notablemente m?s que de cualquier otra figura p?blica del pa?s, presidente incluido.
La demostraci?n de ese poder se pudo ver materializado hace unos meses. Cuando el 19 de septiembre, aprovechando el National Voter Registration Day, la cantante public? en su cuenta de Instagram (283 millones de seguidores) un post llamando a sus conciudadanos a registrarse para votar, la organizaci?n Vote.org experiment? una avalancha s?bita de 35.000 solicitudes para hacerlo, un incremento del 1,226% respecto a la hora antes de esa publicaci?n, y un 115% m?s en la franja de votantes de 18 a?os en comparaci?n con el mismo d?a del a?o anterior.
Otra de las causas del temor que despierta Swift en Trump y los suyos es hasta qué punto la artista podr?a ser la encarnaci?n perfecta del ideal de su electorado. Adem?s de blanca, anglosajona y cristiana (al menos hasta algunas crisis de fe de las que ha dejado constancia en sus canciones), la cantante naci? y se crio en Wyomissing, una de esas peque?as ciudades del Rust Belt (el 'cintur?n del ?xido') americano que han visto c?mo su industria hu?a en busca de mercados con la mano de obra m?s barata, convirtiéndose en un importante caladero de votos de unos republicanos que han sabido capitalizar el descontento de la clase trabajadora blanca. Wyomissing est? Pensilvania, uno de los disputados swing states que deciden cada elecci?n estadounidense reciente por algunos pu?ados de votos.
No solo eso. Taylor vive desde hace a?os (al menos por temporadas) en Nashville, Tennessee, la capital de la m?sica country. Fue all? donde se traslad? a vivir con sus padres cuando, siendo apenas una adolescente, decidi? que quer?a ser la nueva Shania Twain y consagrarse a ese estilo musical. El country ha sido hist?ricamente la m?sica de la América profunda, asociada a los sectores m?s conservadores de esa sociedad. A pesar de contar con una larga lista de artistas marcadamente progresistas, con Woody Guthrie (este m?s folk que puramente country), Willie Nelson, Kris Kristofferson o Lucinda Williams a la cabeza, el country sigue siendo la m?sica que brota a todo volumen de los altavoces de las descomunales pickups con banderas americanas que proclaman a los cuatro vientos su apoyo al movimiento MAGA (Make America Great Again) construido en torno al candidato republicano.
Que con los a?os Swift haya ido evolucionando hacia una m?sica mucho m?s pop que de ra?ces y sombrero de cowboy no impide que siga teniendo m?s posibilidades de apelar a ese electorado conservador que muchas otras grandes estrellas, a pesar de que ?ltimamente hayamos visto c?mo algunas de las m?s populares viran hacia el country aunque vengan de tradiciones musicales totalmente diferentes (el caso de Beyoncé y su ?ltimo ?lbum) o c?mo en ese estilo han surgido artistas de enorme éxito como Orville Peck (abiertamente gay) o Lil Nas X (una persona negra adem?s de manifiestamente queer) muy alejados del estereotipo blanco y heterosexual que era la norma hasta ahora. No es de extra?ar que la audiencia tradicional del country se sienta asediada por ese giro s?bitamente progresista de la que hab?a sido banda sonora de su vida. Pero ya se sabe que no son las celebridades, ni la influencia de la m?sica o del entretenimiento en general, quienes deciden unas elecciones, aunque puedan tener un papel importante. Al menos hasta ahora. Ser? interesante ver, en el caso de que Taylor Swift se decida a apoyar a alg?n candidato, si es realmente esa game-changer, esa persona capaz de cambiar las reglas del juego, que tantos ven en ella.
ÃßËÑ... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/taylor-swift-todopoderosa-cantante-frenar-103040053)
Aunque durante la primera parte de su carrera Swift se declaraba apol?tica, todo cambi? para la cantante al mismo tiempo que lo hizo para tantas mujeres americanas: con la victoria de Trump en 2016. Abiertamente favorable al aborto y a las causas b?sicas del progresismo (igualdad de género, antirracismo, derechos LGTBIQ (https://aglitk.com/tags/lgtbiq/)+...), su primer posicionamiento pol?tico claro lleg? en 2018, cuando decidi? apoyar p?blicamente a los candidatos dem?cratas de su estado (Tennessee) en las elecciones de mitad de mandato. En 2020 ir?a un paso m?s all? al mostrar su apoyo a la candidatura de Joe Biden y prestar su canci?n Only the Young, en la que alude a los tiroteos en centros escolares y critica veladamente a Trump y los suyos, para que fuera utilizada en la campa?a dem?crata. La vicepresidente Kamala Harris le dio las gracias por los servicios prestados.
Hasta el momento, la todopoderosa Swift, ?nica mujer que ha sido dos veces portada de la revista Time como 'Persona del a?o' (en 2017 y 2023), no se ha manifestado en favor de ninguno de los candidatos u opciones pol?ticas que competir?n por la presidencia este 2024, aunque parece intuirse por d?nde podr?an ir los tiros. La cantante se ha limitado a animar a los estadounidenses a inscribirse para votar, lo que, en un pa?s en el que los republicanos luchan denodadamente en un importante n?mero de estados para dificultar el registro de votantes o poner en cuesti?n a muchos de los que ya est?n inscritos, pr?cticamente se podr?a considerar un pronunciamiento pol?tico.
De lo que no hay duda es de que los republicanos la temen. Mucho. Sus candidatos y su legi?n de tuiteros llevan meses tratando de demoler su figura y alimentando teor?as conspiranoicas como que la artista es un exponente de una especie de operaci?n de propaganda dise?ada desde el Pent?gono. Fue muy criticado desde ese lado el protagonismo que se le dio en la ?ltima Super Bowl, donde la cantante actu? mientras su actual pareja, Travis Kelce, era uno de los jugadores que compet?a en el campo. Que la que consideraban "novia de América" se hubiera juntado con una super estrella del f?tbol americano ten?a mucho de sue?o tornado en pesadilla para la América conservadora. Hasta el punto de que se lleg? a tachar su relaci?n de PRomance ('romance de relaciones p?blicas'), cuestionando incluso c?mo se hab?an conocido y si la artista hab?a dedicado el tiempo a hacer el duelo de su anterior pareja que esos sectores consideraban necesario. Horas antes del espect?culo, Donald Trump lleg? a pedir a la artista a traves de X (antes Twitter) que no se pronunciase a favor de Biden, record?ndole cu?nto dinero ésta le deb?a a la Ley de Modernizaci?n de la M?sica (https://aglitk.com/tags/musica/)aprobada bajo su mandato, que actualiz? y mejor? el régimen de ingresos por derechos de autor para los creadores.
Una bomba nuclear del consenso
Una de las claves que convierten a Swift en un arma poderosa a la hora de frenar la llegada de Trump a la Casa Blanca es su inmensa popularidad en EEUU, un abrumador consenso pocas veces visto antes. Seg?n un estudio de la firma Morning Consult que recog?a The Guardian, el 53% de los americanos se reconocen fans de la cantante, con un 16% declar?ndose ‘entusiastas’. Y eso que la encuesta se realiz? en marzo de 2023, antes de que arrancase el abrumador The Eras Tour que ahora llega a Madrid, pero que antes ha arrasado otros rincones del planeta, en particular EEUU, batiendo todos los récords de alcance en directo de un artista. Otro sondeo, este de la cadena NBC y realizado en noviembre del a?o pasado, concluy? que el 40% de los electores registrados en EEUU ten?an una visi?n positiva de Swift, notablemente m?s que de cualquier otra figura p?blica del pa?s, presidente incluido.
La demostraci?n de ese poder se pudo ver materializado hace unos meses. Cuando el 19 de septiembre, aprovechando el National Voter Registration Day, la cantante public? en su cuenta de Instagram (283 millones de seguidores) un post llamando a sus conciudadanos a registrarse para votar, la organizaci?n Vote.org experiment? una avalancha s?bita de 35.000 solicitudes para hacerlo, un incremento del 1,226% respecto a la hora antes de esa publicaci?n, y un 115% m?s en la franja de votantes de 18 a?os en comparaci?n con el mismo d?a del a?o anterior.
Otra de las causas del temor que despierta Swift en Trump y los suyos es hasta qué punto la artista podr?a ser la encarnaci?n perfecta del ideal de su electorado. Adem?s de blanca, anglosajona y cristiana (al menos hasta algunas crisis de fe de las que ha dejado constancia en sus canciones), la cantante naci? y se crio en Wyomissing, una de esas peque?as ciudades del Rust Belt (el 'cintur?n del ?xido') americano que han visto c?mo su industria hu?a en busca de mercados con la mano de obra m?s barata, convirtiéndose en un importante caladero de votos de unos republicanos que han sabido capitalizar el descontento de la clase trabajadora blanca. Wyomissing est? Pensilvania, uno de los disputados swing states que deciden cada elecci?n estadounidense reciente por algunos pu?ados de votos.
No solo eso. Taylor vive desde hace a?os (al menos por temporadas) en Nashville, Tennessee, la capital de la m?sica country. Fue all? donde se traslad? a vivir con sus padres cuando, siendo apenas una adolescente, decidi? que quer?a ser la nueva Shania Twain y consagrarse a ese estilo musical. El country ha sido hist?ricamente la m?sica de la América profunda, asociada a los sectores m?s conservadores de esa sociedad. A pesar de contar con una larga lista de artistas marcadamente progresistas, con Woody Guthrie (este m?s folk que puramente country), Willie Nelson, Kris Kristofferson o Lucinda Williams a la cabeza, el country sigue siendo la m?sica que brota a todo volumen de los altavoces de las descomunales pickups con banderas americanas que proclaman a los cuatro vientos su apoyo al movimiento MAGA (Make America Great Again) construido en torno al candidato republicano.
Que con los a?os Swift haya ido evolucionando hacia una m?sica mucho m?s pop que de ra?ces y sombrero de cowboy no impide que siga teniendo m?s posibilidades de apelar a ese electorado conservador que muchas otras grandes estrellas, a pesar de que ?ltimamente hayamos visto c?mo algunas de las m?s populares viran hacia el country aunque vengan de tradiciones musicales totalmente diferentes (el caso de Beyoncé y su ?ltimo ?lbum) o c?mo en ese estilo han surgido artistas de enorme éxito como Orville Peck (abiertamente gay) o Lil Nas X (una persona negra adem?s de manifiestamente queer) muy alejados del estereotipo blanco y heterosexual que era la norma hasta ahora. No es de extra?ar que la audiencia tradicional del country se sienta asediada por ese giro s?bitamente progresista de la que hab?a sido banda sonora de su vida. Pero ya se sabe que no son las celebridades, ni la influencia de la m?sica o del entretenimiento en general, quienes deciden unas elecciones, aunque puedan tener un papel importante. Al menos hasta ahora. Ser? interesante ver, en el caso de que Taylor Swift se decida a apoyar a alg?n candidato, si es realmente esa game-changer, esa persona capaz de cambiar las reglas del juego, que tantos ven en ella.
ÃßËÑ... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/taylor-swift-todopoderosa-cantante-frenar-103040053)