Reem
06-10-2024, 06:11 PM
"Espa?a fabrica m?s pol?tica de la que puede consumir". La frase, atribuida a un diplom?tico extranjero, la puso en circulaci?n hace un tiempo el periodista Enric Juliana. Y puede que algo de raz?n tenga. Y no solo por las elecciones de hoy, la sexta cita en un a?o. Desde hace una década, coincidiendo con la crisis de representaci?n tras el cataclismo econ?mico, Espa?a vive una inflaci?n de pol?tica. Los ciudadanos se encuentra atrapados en una paradoja: cuanto mayor es el aparente hartazgo con los partidos, mayor es la mercanc?a pol?tica en circulaci?n, y m?s amplia la conversaci?n p?blica, marcada a menudo por el ruido y la furia. Seg?n un estudio reciente del CIS, el 59 % de los ciudadanos est?n muy o bastante interesados en los asuntos p?blicos. La pol?tica como género parece vivir una edad de oro sin fin que se manifiesta en diferentes escenarios.
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Pablo Sim?n, profesor de Ciencia Pol?tica de la Carlos III
PILAR CORT?S
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2000
1333
La calle: una sociedad m?s politizada
Al principio, est? la demanda. “Efectivamente hay un incremento del interés pol?tico en Espa?a, fundamentalmente desde 2011 hasta aqu?, muy intenso, pero desde la pandemia ha retrocedido otra vez”, explica Pablo Sim?n, profesor de ciencia pol?tica en la Universidad Carlos III de Madrid y uno de los rostros m?s conocidos del colectivo por su presencia medi?tica. En su opini?n, ese aumento de demanda bebe de dos contextos, el nacional y el global. “Ha habido, de un lado, un cambio ligado a una situaci?n end?gena: ruptura de partidos, gobiernos de coalici?n, mociones de censura, reclamaciones de independencia… Son cosas que no nos hab?an pasado antes y generan m?s interés y m?s atenci?n del p?blico. Pero también estamos en un tiempo inestable a nivel global. Nos preocupan las elecciones americanas, hay un brexit, la extrema derecha en auge en muchos pa?ses… La atenci?n del p?blico es m?s intensa que en tiempos con mayor estabilidad general. Espa?a ha tendido a acompasarse con democracias de nuestro entorno. Y ya somos una democracia madura, tenemos m?s de 40 a?os. No nos pasan cosas muy distintas a lo que ocurre en muchos pa?ses”, se?ala el polit?logo.
Coincide Blanca Nicasio, profesora de Ciencia Pol?tica de la Universidad CEU Cardenal Herrera de la Comunidad Valenciana: “Venimos de unos a?os de politizaci?n del espacio p?blico: la crisis econ?mica deriva en crisis pol?tica, social y cultural, que fomenta una mayor demanda para entender fen?menos, causas, efectos. Adem?s, la ruptura del sistema de partidos, los nuevos liderazgos, los nuevos discursos… La pol?tica se abre con el 15M. Hay m?s demanda y es una oportunidad para los polit?logos, para mostrar a la ciudadan?a su ?rea de conocimiento. Y los medios también tienen interés en hablar de lo que pasa. Este boom va vinculado a ese proceso de politizaci?n del espacio publico. Hasta d?nde va a llegar no lo podemos saber”.
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Debate televisivo en las pasada generales
EFE
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1333
El plat?: la pol?tica muta en espect?culo
En un determinado momento, el mercado de oferta prest? atenci?n a la demanda, y ah? se produce “el salto a la espectacularizaci?n, a convertirlo en producto de consumo, una cierta burbuja de la pol?tica”, opina la soci?loga y profesora de la Universidad de Valencia, A?da Vizca?no. “Es una pol?tica muy de inmediatez y de consumo, porque no hay un mayor interés social en la reflexi?n o en los grandes conceptos, sino mayor consumo de la actualidad. Lo que vemos en televisi?n es una pol?tica m?s testoster?nica, alimentada por la adrenalina de la inmediatez, y la pol?tica es una fuente de producci?n constante de informaci?n inmediata. Todo eso unido a la inestabilidad, a la cuesti?n emocional y la incertidumbre de futuro, genera la situaci?n que tenemos”, se?ala sobre el actual momento medi?tico. Es un fen?meno esencialmente madrile?o, donde operan la mayor?a de grupos medi?ticos y empresas ligadas a este sector. Y ha seguido creciendo. En el debate de pol?tica general de 2022, por citar un ejemplo, se acreditaron casi 400 periodistas. Son cifras de espect?culo deportivo.
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Antonio Garc?a Ferreras y Ana Pastor, de La Sexta
LEVANTE-EMV
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644
430
En efecto, basta con encender la tele. De las 25 emisiones televisivas m?s vistas en abril, menos la Final de Copa y ‘Tu cara me suena’, todas eran informativos. Cada d?a, entre semana, 5,2 millones de espectadores ven un noticiero. De la ma?ana a la noche, en teles p?blicas y privadas, las tertulias pol?ticas llevan una década salpicando la parrilla. Como s?mbolo de la espectacularizaci?n, La Sexta emite cada d?a cerca de 10 horas de programaci?n pol?tica, sin contar los programas espec?ficos de la noche del fin de semana. “Hubo un gran momento de eclosi?n, de analistas pol?ticos, de programas pol?ticos durante la emergencia de los nuevos partidos. Coincide con un formato relativamente nuevo en Espa?a que es el ‘infotainment’. En paralelo, hemos tenido muchos comicios, muy seguidos”, apunta Pablo Sim?n, habitual de estos espacios.
Hay un dato que conviene no perder de vista: es barato llenar horas de programaci?n con bustos parlantes. M?s barato que producir otros contenidos. La década de oro de la pol?tica ha creado un colegio de tertulianos. Y la peonada tampoco est? por las nubes, reconocen las fuentes consultados. Desde la crisis de las televisiones, la participaci?n espor?dica ronda los 300 euros. Depende, en cualquier caso, de si el medio es p?blico o privado, o de si el tertuliano tiene contrato blindado con su grupo medi?tico, con cantidades fijas. En época de Francisco Camps, los comentaristas que ven?an de Madrid a participar en los programas de Canal 9 ten?an una retribuci?n de unos 800 euros, al margen del transporte y el hotel. Otros tiempos.
La industria: los nuevos gur?s de la consultor?a y las encuestas
Espa?a fabrica m?s pol?tica de la que puede consumir y esa materia prima necesita de una industria de procesamiento. Este auge de la pol?tica, podr?a decirse, ha creado un complejo pol?tico industrial en diferentes disciplinas. Ver?nica Fumanal, consultora pol?tica y expresidenta de la Asociaci?n de Comunicaci?n Pol?tica (Acop), se?ala: “Comunicaci?n y pol?tica ya son dos caras de la misma moneda. Es inevitable que se profesionalice cada vez m?s el sector porque la competencia es mucho mas dura. No solo entre propios pol?ticos sino la que un pol?tico tiene con todos los impactos a nivel audiovisual”. En este contexto, la consultor?a “es un sector en alza”, que cada vez tendr? mayor impacto, vaticina. “Cualquier alcalde de ciudad media necesita un asesor en comunicaci?n, que ya no es un jefe de prensa, eso es solo una parte. En Acop hemos visto que el sector se ha ampliado much?simo. Antes, estos servicios se utilizaban m?s por grandes partidos a nivel nacional y ahora todo el mundo tiene asesores en comunicaci?n. Hay multitud de m?sters en comunicaci?n pol?tica. A nivel local es uno de los nichos de negocios mas importante. La comunicaci?n forma parte de la misma acci?n pol?tica”.
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Ver?nica Fumanal, experta en comunicaci?n pol?tica
FERNANDO BUSTAMANTE
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2000
1338
El consultor, el estratega, es una figura que ha adquirido prestigio, casi m?tico en algunos casos, pero no es la ?nica industria que ha prosperado. Esta es también la era de las encuestas, los gur?s que predicen el futuro y susurran a los pol?ticos. “Todos los medios quieren tener una casa afiliada porque eso permite generar noticias, intentar condicionar a la opini?n p?blica y coincide con un cierto abaratamiento en la elaboraci?n de las encuestas”, explica Pablo Sim?n. Durante los ?ltimos d?as antes de las ?ltimas elecciones generales, hace ahora un a?o, se publicaron en Espa?a m?s de un centenar de encuestas. Algunos d?as hasta seis.
Adem?s de la presi?n de los medios, desde el ?mbito académico se apunta a factores como que los investigadores (otro sector al alza) cada vez piden m?s datos. No solo nacen nuevas empresas demosc?picas locales; se est? produciendo el desembarco de otras casas de encuestas internacionales, con filiales en Espa?a. Es el caso de la brit?nica YouGov, o hace escasos d?as el anuncio del aterrizaje de la francesa Cluster17. Fuentes del sector reconocen adem?s esa rebaja de costes. Hoy, por 6.000 euros, explica un cliente del sector, se puede tener un panel on line que permita seguir generando informaci?n. “Lo normal es que una buena encuesta te cueste, para la C. Valenciana con 5 millones de personas, unos 16.000 euros. Si le a?ades an?lisis cualitativo, con soci?logo y dos focus group, por ejemplo, ya son unos 30.000 euros”, a?aden desde un partido pol?tico.
La cultura: de Netflix a las librer?as
El negocio de la cultura también es un reflejo del auge global de la pol?tica. Basta ver el cat?logo de las plataformas audiovisuales desde hace un tiempo: Borgen, Baron Noir, The Parliament, Vota Juan, Juego de Tronos, El Reino, House of Cards, Bodyguard, Sucesor Designado, Succession, The Politician, Marseille, La ciudad secreta, Intimidad, El vicio del poder, El instante m?s oscuro… adem?s de un listado inabarcable de documentales. El poder y la pol?tica, temas universales, ocupan los espacios de ficci?n audiovisual. Algo similar ha ocurrido con el negocio editorial, con un bombardeo constante de novedades en torno al momento pol?tico nacional y global: desde las m?s académicas a las divulgativas o las orientadas a la comunicaci?n pol?tica, adem?s de las memorias, de regreso desde hace a?os. El ensayo es un género en auge. “Hay un incremento de publicaciones en torno a la pol?tica. Muchas novedades giran en torno a la banalizaci?n o la radicalizaci?n de la pol?tica”, constata Juan Pedro Font de Mora, presidente del Gremi de Llibrers, que, sin embargo, a?ade: "Sinceramente, creo que la mayor?a de clientes lo que buscan es evadirse de la pol?tica. [...] Se publica mucho en Espa?a, pero en la ?ltima feria del libro en ning?n momento hubo un ensayo en la lista de m?s vendidos".
La academia: La madurez de la ciencia pol?tica
M?s all? del consumo acelerado y la consolidaci?n de una ‘industria auxiliar’, la ciencia pol?tica, su dimensi?n académica, también ha vivido un salto en Espa?a. Por el lado de la oferta y de la demanda. Hace diez a?os, por ejemplo, la UV se situ? como el centro con mayor nota de acceso. La emergencia de Podemos, una formaci?n dirigida por polit?logos, se entiende como un factor decisivo para el mayor protagonismo de los estudios de Ciencia Pol?tica. “El boom de la ciencia pol?tica y el aumento de la demanda del alumnado llega con la crisis y Podemos. Pasamos de ser muy pocos a ser clases de 40 o 50 personas, que est? muy bien aun siendo una titulaci?n peque?a”, se?ala la soci?loga Aida Vizca?no. Una década después, la ciencia pol?tica sigue despertando interés. Desde la crisis de 2011, se han matriculado en los diferentes grados de Pol?ticas unos 1.500 alumnos. Cada a?o se preinscriben como primera opci?n en torno a 90 alumnos. El récord, 106, fue precisamente en 2014, el a?o de la explosi?n de Podemos.
Pero los estudios han mutado. La mayor demanda se ha desplazado hacia los dobles grados, en busca de mayores garant?as de futuro laboral. “El doble grado de Derecho-Pol?ticas no tiene nada que envidiar, en cuanto al nivel del alumnado, a la Pompeu Fabra o la Carlos III”, se?ala Carlos Garc?a-Rivero, catedr?tico de Ciencia Pol?tica y coordinador del grado de la UV. La oferta ha ido mutando. En estos momentos, adem?s del grado de Pol?ticas, en la UV se imparte el de Pol?ticas-Sociolog?a, el de Derecho-Pol?ticas (la joya de la corona), y se est? dise?ando un nuevo doble grado de Pol?ticas-Relaciones Internacionales.
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Estudiantes de la UCH-CEU de Pol?ticas, en una imagen reciente
GERM?N CABALLERO
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2000
1333
Algo similar ocurre en la Universidad CEU Cardenal Herrera de la Comunidad Valenciana. Desde hace a?os, el n?mero de alumnos crece a un ritmo de en torno a un 10 %. En estos momentos, unos 130 alumnos estudian Ciencia Pol?tica en ese campus. “Sobre todo se interesan en el doble grado: Derecho y Pol?ticas es el que m?s alumnos tiene, seguido de Periodismo y Ciencias Pol?ticas. Y el interés que despunta en los ?ltimos a?os es Ciencias Pol?ticas y Direcci?n de Empresas. Son alumnos que buscan un enfoque internacional a su formaci?n, abriéndose la v?a del sector p?blico y privado”, coincide Blanca Nicasio.
?Se ha consolidado la Ciencia Pol?tica en Espa?a? “Se han abierto m?s centros que nunca, en m?s lugares en los que Ciencia Pol?tica era un complemento deudor de Derecho, se ha ido emancipando, con departamentos m?s internacionalizados, m?s centros de investigaci?n, m?s profesionales que se dedican a la docencia y sus propios proyectos… Hay una progresiva madurez”, constata Pablo Sim?n, de la Carlos III. “La madurez de la disciplina se ve en las publicaciones”, a?ade Garc?a-Rivero. “Cada vez es m?s com?n ver nombres de investigadores espa?oles en las mejores revistas del mundo, cosa que era menos frecuente hace 25 ? 30 a?os. La presencia en los mejores congresos del mundo es algo normal hoy por hoy y hay alg?n centro que est? al mejor nivel internacional como la Pompeu Fabra, e investigadores punteros como Eva Anduiza, Ignacio Lago, Xavier Coller, Ignacio S?nchez Cuenca, Pedro Riera o Mariano Torcal, por citar algunos, aunque hay bastantes m?s que ponen habitualmente sus nombres en las mejores revistas del mundo. Las nuevas generaciones también vienen pegando fuerte manteniendo ese nivel”, concluye el catedr?tico de la UV.
ÃßËÑ... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/decada-gurus-politica-103611294)
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Pablo Sim?n, profesor de Ciencia Pol?tica de la Carlos III
PILAR CORT?S
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La calle: una sociedad m?s politizada
Al principio, est? la demanda. “Efectivamente hay un incremento del interés pol?tico en Espa?a, fundamentalmente desde 2011 hasta aqu?, muy intenso, pero desde la pandemia ha retrocedido otra vez”, explica Pablo Sim?n, profesor de ciencia pol?tica en la Universidad Carlos III de Madrid y uno de los rostros m?s conocidos del colectivo por su presencia medi?tica. En su opini?n, ese aumento de demanda bebe de dos contextos, el nacional y el global. “Ha habido, de un lado, un cambio ligado a una situaci?n end?gena: ruptura de partidos, gobiernos de coalici?n, mociones de censura, reclamaciones de independencia… Son cosas que no nos hab?an pasado antes y generan m?s interés y m?s atenci?n del p?blico. Pero también estamos en un tiempo inestable a nivel global. Nos preocupan las elecciones americanas, hay un brexit, la extrema derecha en auge en muchos pa?ses… La atenci?n del p?blico es m?s intensa que en tiempos con mayor estabilidad general. Espa?a ha tendido a acompasarse con democracias de nuestro entorno. Y ya somos una democracia madura, tenemos m?s de 40 a?os. No nos pasan cosas muy distintas a lo que ocurre en muchos pa?ses”, se?ala el polit?logo.
Coincide Blanca Nicasio, profesora de Ciencia Pol?tica de la Universidad CEU Cardenal Herrera de la Comunidad Valenciana: “Venimos de unos a?os de politizaci?n del espacio p?blico: la crisis econ?mica deriva en crisis pol?tica, social y cultural, que fomenta una mayor demanda para entender fen?menos, causas, efectos. Adem?s, la ruptura del sistema de partidos, los nuevos liderazgos, los nuevos discursos… La pol?tica se abre con el 15M. Hay m?s demanda y es una oportunidad para los polit?logos, para mostrar a la ciudadan?a su ?rea de conocimiento. Y los medios también tienen interés en hablar de lo que pasa. Este boom va vinculado a ese proceso de politizaci?n del espacio publico. Hasta d?nde va a llegar no lo podemos saber”.
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Debate televisivo en las pasada generales
EFE
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El plat?: la pol?tica muta en espect?culo
En un determinado momento, el mercado de oferta prest? atenci?n a la demanda, y ah? se produce “el salto a la espectacularizaci?n, a convertirlo en producto de consumo, una cierta burbuja de la pol?tica”, opina la soci?loga y profesora de la Universidad de Valencia, A?da Vizca?no. “Es una pol?tica muy de inmediatez y de consumo, porque no hay un mayor interés social en la reflexi?n o en los grandes conceptos, sino mayor consumo de la actualidad. Lo que vemos en televisi?n es una pol?tica m?s testoster?nica, alimentada por la adrenalina de la inmediatez, y la pol?tica es una fuente de producci?n constante de informaci?n inmediata. Todo eso unido a la inestabilidad, a la cuesti?n emocional y la incertidumbre de futuro, genera la situaci?n que tenemos”, se?ala sobre el actual momento medi?tico. Es un fen?meno esencialmente madrile?o, donde operan la mayor?a de grupos medi?ticos y empresas ligadas a este sector. Y ha seguido creciendo. En el debate de pol?tica general de 2022, por citar un ejemplo, se acreditaron casi 400 periodistas. Son cifras de espect?culo deportivo.
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Antonio Garc?a Ferreras y Ana Pastor, de La Sexta
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En efecto, basta con encender la tele. De las 25 emisiones televisivas m?s vistas en abril, menos la Final de Copa y ‘Tu cara me suena’, todas eran informativos. Cada d?a, entre semana, 5,2 millones de espectadores ven un noticiero. De la ma?ana a la noche, en teles p?blicas y privadas, las tertulias pol?ticas llevan una década salpicando la parrilla. Como s?mbolo de la espectacularizaci?n, La Sexta emite cada d?a cerca de 10 horas de programaci?n pol?tica, sin contar los programas espec?ficos de la noche del fin de semana. “Hubo un gran momento de eclosi?n, de analistas pol?ticos, de programas pol?ticos durante la emergencia de los nuevos partidos. Coincide con un formato relativamente nuevo en Espa?a que es el ‘infotainment’. En paralelo, hemos tenido muchos comicios, muy seguidos”, apunta Pablo Sim?n, habitual de estos espacios.
Hay un dato que conviene no perder de vista: es barato llenar horas de programaci?n con bustos parlantes. M?s barato que producir otros contenidos. La década de oro de la pol?tica ha creado un colegio de tertulianos. Y la peonada tampoco est? por las nubes, reconocen las fuentes consultados. Desde la crisis de las televisiones, la participaci?n espor?dica ronda los 300 euros. Depende, en cualquier caso, de si el medio es p?blico o privado, o de si el tertuliano tiene contrato blindado con su grupo medi?tico, con cantidades fijas. En época de Francisco Camps, los comentaristas que ven?an de Madrid a participar en los programas de Canal 9 ten?an una retribuci?n de unos 800 euros, al margen del transporte y el hotel. Otros tiempos.
La industria: los nuevos gur?s de la consultor?a y las encuestas
Espa?a fabrica m?s pol?tica de la que puede consumir y esa materia prima necesita de una industria de procesamiento. Este auge de la pol?tica, podr?a decirse, ha creado un complejo pol?tico industrial en diferentes disciplinas. Ver?nica Fumanal, consultora pol?tica y expresidenta de la Asociaci?n de Comunicaci?n Pol?tica (Acop), se?ala: “Comunicaci?n y pol?tica ya son dos caras de la misma moneda. Es inevitable que se profesionalice cada vez m?s el sector porque la competencia es mucho mas dura. No solo entre propios pol?ticos sino la que un pol?tico tiene con todos los impactos a nivel audiovisual”. En este contexto, la consultor?a “es un sector en alza”, que cada vez tendr? mayor impacto, vaticina. “Cualquier alcalde de ciudad media necesita un asesor en comunicaci?n, que ya no es un jefe de prensa, eso es solo una parte. En Acop hemos visto que el sector se ha ampliado much?simo. Antes, estos servicios se utilizaban m?s por grandes partidos a nivel nacional y ahora todo el mundo tiene asesores en comunicaci?n. Hay multitud de m?sters en comunicaci?n pol?tica. A nivel local es uno de los nichos de negocios mas importante. La comunicaci?n forma parte de la misma acci?n pol?tica”.
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Ver?nica Fumanal, experta en comunicaci?n pol?tica
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El consultor, el estratega, es una figura que ha adquirido prestigio, casi m?tico en algunos casos, pero no es la ?nica industria que ha prosperado. Esta es también la era de las encuestas, los gur?s que predicen el futuro y susurran a los pol?ticos. “Todos los medios quieren tener una casa afiliada porque eso permite generar noticias, intentar condicionar a la opini?n p?blica y coincide con un cierto abaratamiento en la elaboraci?n de las encuestas”, explica Pablo Sim?n. Durante los ?ltimos d?as antes de las ?ltimas elecciones generales, hace ahora un a?o, se publicaron en Espa?a m?s de un centenar de encuestas. Algunos d?as hasta seis.
Adem?s de la presi?n de los medios, desde el ?mbito académico se apunta a factores como que los investigadores (otro sector al alza) cada vez piden m?s datos. No solo nacen nuevas empresas demosc?picas locales; se est? produciendo el desembarco de otras casas de encuestas internacionales, con filiales en Espa?a. Es el caso de la brit?nica YouGov, o hace escasos d?as el anuncio del aterrizaje de la francesa Cluster17. Fuentes del sector reconocen adem?s esa rebaja de costes. Hoy, por 6.000 euros, explica un cliente del sector, se puede tener un panel on line que permita seguir generando informaci?n. “Lo normal es que una buena encuesta te cueste, para la C. Valenciana con 5 millones de personas, unos 16.000 euros. Si le a?ades an?lisis cualitativo, con soci?logo y dos focus group, por ejemplo, ya son unos 30.000 euros”, a?aden desde un partido pol?tico.
La cultura: de Netflix a las librer?as
El negocio de la cultura también es un reflejo del auge global de la pol?tica. Basta ver el cat?logo de las plataformas audiovisuales desde hace un tiempo: Borgen, Baron Noir, The Parliament, Vota Juan, Juego de Tronos, El Reino, House of Cards, Bodyguard, Sucesor Designado, Succession, The Politician, Marseille, La ciudad secreta, Intimidad, El vicio del poder, El instante m?s oscuro… adem?s de un listado inabarcable de documentales. El poder y la pol?tica, temas universales, ocupan los espacios de ficci?n audiovisual. Algo similar ha ocurrido con el negocio editorial, con un bombardeo constante de novedades en torno al momento pol?tico nacional y global: desde las m?s académicas a las divulgativas o las orientadas a la comunicaci?n pol?tica, adem?s de las memorias, de regreso desde hace a?os. El ensayo es un género en auge. “Hay un incremento de publicaciones en torno a la pol?tica. Muchas novedades giran en torno a la banalizaci?n o la radicalizaci?n de la pol?tica”, constata Juan Pedro Font de Mora, presidente del Gremi de Llibrers, que, sin embargo, a?ade: "Sinceramente, creo que la mayor?a de clientes lo que buscan es evadirse de la pol?tica. [...] Se publica mucho en Espa?a, pero en la ?ltima feria del libro en ning?n momento hubo un ensayo en la lista de m?s vendidos".
La academia: La madurez de la ciencia pol?tica
M?s all? del consumo acelerado y la consolidaci?n de una ‘industria auxiliar’, la ciencia pol?tica, su dimensi?n académica, también ha vivido un salto en Espa?a. Por el lado de la oferta y de la demanda. Hace diez a?os, por ejemplo, la UV se situ? como el centro con mayor nota de acceso. La emergencia de Podemos, una formaci?n dirigida por polit?logos, se entiende como un factor decisivo para el mayor protagonismo de los estudios de Ciencia Pol?tica. “El boom de la ciencia pol?tica y el aumento de la demanda del alumnado llega con la crisis y Podemos. Pasamos de ser muy pocos a ser clases de 40 o 50 personas, que est? muy bien aun siendo una titulaci?n peque?a”, se?ala la soci?loga Aida Vizca?no. Una década después, la ciencia pol?tica sigue despertando interés. Desde la crisis de 2011, se han matriculado en los diferentes grados de Pol?ticas unos 1.500 alumnos. Cada a?o se preinscriben como primera opci?n en torno a 90 alumnos. El récord, 106, fue precisamente en 2014, el a?o de la explosi?n de Podemos.
Pero los estudios han mutado. La mayor demanda se ha desplazado hacia los dobles grados, en busca de mayores garant?as de futuro laboral. “El doble grado de Derecho-Pol?ticas no tiene nada que envidiar, en cuanto al nivel del alumnado, a la Pompeu Fabra o la Carlos III”, se?ala Carlos Garc?a-Rivero, catedr?tico de Ciencia Pol?tica y coordinador del grado de la UV. La oferta ha ido mutando. En estos momentos, adem?s del grado de Pol?ticas, en la UV se imparte el de Pol?ticas-Sociolog?a, el de Derecho-Pol?ticas (la joya de la corona), y se est? dise?ando un nuevo doble grado de Pol?ticas-Relaciones Internacionales.
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Estudiantes de la UCH-CEU de Pol?ticas, en una imagen reciente
GERM?N CABALLERO
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Algo similar ocurre en la Universidad CEU Cardenal Herrera de la Comunidad Valenciana. Desde hace a?os, el n?mero de alumnos crece a un ritmo de en torno a un 10 %. En estos momentos, unos 130 alumnos estudian Ciencia Pol?tica en ese campus. “Sobre todo se interesan en el doble grado: Derecho y Pol?ticas es el que m?s alumnos tiene, seguido de Periodismo y Ciencias Pol?ticas. Y el interés que despunta en los ?ltimos a?os es Ciencias Pol?ticas y Direcci?n de Empresas. Son alumnos que buscan un enfoque internacional a su formaci?n, abriéndose la v?a del sector p?blico y privado”, coincide Blanca Nicasio.
?Se ha consolidado la Ciencia Pol?tica en Espa?a? “Se han abierto m?s centros que nunca, en m?s lugares en los que Ciencia Pol?tica era un complemento deudor de Derecho, se ha ido emancipando, con departamentos m?s internacionalizados, m?s centros de investigaci?n, m?s profesionales que se dedican a la docencia y sus propios proyectos… Hay una progresiva madurez”, constata Pablo Sim?n, de la Carlos III. “La madurez de la disciplina se ve en las publicaciones”, a?ade Garc?a-Rivero. “Cada vez es m?s com?n ver nombres de investigadores espa?oles en las mejores revistas del mundo, cosa que era menos frecuente hace 25 ? 30 a?os. La presencia en los mejores congresos del mundo es algo normal hoy por hoy y hay alg?n centro que est? al mejor nivel internacional como la Pompeu Fabra, e investigadores punteros como Eva Anduiza, Ignacio Lago, Xavier Coller, Ignacio S?nchez Cuenca, Pedro Riera o Mariano Torcal, por citar algunos, aunque hay bastantes m?s que ponen habitualmente sus nombres en las mejores revistas del mundo. Las nuevas generaciones también vienen pegando fuerte manteniendo ese nivel”, concluye el catedr?tico de la UV.
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