Quedan poco m?s de cuatro meses para las elecciones presidenciales de Estados Unidos del 5 de noviembre y este jueves esa carrera enfrenta un momento que puede ser determinante: el primer debate de dos previstos entre el presidente dem?crata Joe Biden y el expresidente republicano Donald Trump.

Se trata de un encuentro de alto voltaje entre dos hombres que, adem?s de enfrentados en lo pol?tico, sienten una profunda animadversi?n mutua. Numerosos estadounidenses sienten apat?a e incluso rechazo ante el hecho de tener que volver a elegir como en 2020 entre Biden, ahora de 81 a?os, y Trump, de 78. Aun as?, la expectaci?n ante el debate es m?xima y hay mucho en juego.

Estas son las claves de un duelo que representa "un momento crucial", como ha dicho el congresista dem?crata y aliado de Biden James Clyburn, y donde estrategas republicanos como Karl Rove ven el potencial de "un gran punto de inflexi?n".

1.Las formas

El debate, que por primera vez desde 1988 no organiza la Comisi?n de Debates Presidenciales sino una cadena privada, CNN, arranca en un estudio de Atlanta a las9 de la noche (3 de la madrugada del viernes en la Espa?a peninsular).

Durar? 90 minutos y tendr? dos pausas publicitarias, en las que los dos candidatos no podr?n interactuar con sus equipos de campa?a.

No habr? declaraciones iniciales y los candidatos tendr?n dos minutos para dar sus respuestas a los dos moderadores (los periodistas pol?ticos de CNN Jake Tapper y Dana Bash), uno para réplica y otro para contrarréplica. Los micr?fonos se silenciar?n cuando no sea su turno de palabra.

Biden y Trump estar?n de pie con atriles y se les facilitar? una libreta, l?piz y una botella de agua pero no podr?n tener notas.

Por las condiciones pactadas entre los candidatos, y cumpliendo una petici?n del equipo de Biden, no habr? p?blico en el plat?, algo que no suced?a desde 1960, cuando se celebr? el primero de los debates televisados entre John F. Kennedy y Richard Nixon y que dejar? a Trump sin el habitual aliento que le dan las reacciones de sus seguidores.

Con un lanzamiento de moneda se ha decidido la ubicaci?n y el orden para cerrar el debate. Biden dio prioridad a la posici?n y eligi? quedar situado en la derecha de la pantalla. Dej? con ello a Trump escoger sobre el turno de intervenci?n y el republicano opt? por tener la ?ltima palabra.

Robert Kennedy Jr., el candidato independiente, no cumpli? los requisitos establecidos por CNN para participar en el debate.

2.El fondo

Cuando entren en el estudio de Atlanta este jueves ser? la primera vez que Biden y Trump estén en la misma habitaci?n desde octubre de 2020, cuando se midieron precisamente en el segundo y ?ltimo debate de aquella campa?a que se desarroll? en medio de la pandemia (uno de los tres encuentros previstos entonces se suspendi? cuando Trump se contagi? de covid).

Poco después Biden ganaba aquellas elecciones pero Trump no aceptaba esa victoria y los esfuerzos del republicano por revertir los resultados leg?timos y evitar la transici?n pac?fica de poder, que culminaron en el asalto al Capitolio, est?n detr?s de dos de las cuatro causas penales en su contra. En otra de esas causas, la que le se?al? por intentar interferir en las elecciones de 2016 pagando para silenciar a Stormy Daniels y falsificando documentos contables para ocultarlo, ha sido ya condenado, convirtiéndose en la primera persona que ha ocupado el Despacho Oval que es un criminal convicto.

Esa condena (por la que se dictar? sentencia el 11 de julio) ha ayudado a Biden a mejorar algo en las encuestas, aunque Trump mantiene su ventaja en los sondeos en el pu?ado de estados clave que deciden las elecciones y, adem?s, ha visto dispararse las donaciones a su campa?a tras el veredicto.

Aunque el impacto de los debates es dif?cil de medir, los expertos en su estudio y los estrategas saben que ayudan a decidirse a un peque?o porcentaje de votantes que estaban indecisos o no se hab?an involucrado a?n plenamente en la campa?a. Y aunque esos porcentajes son bajos, pueden marcar la diferencia en elecciones disputadas, como la de este 2024.

3.Los temas

El debate servir? para poner el foco en los temas pol?ticos centrales en una campa?a con la que a?n no han conectado muchos votantes y para que los dos candidatos redoblen sus principales l?neas argumentales.

Si los m?tines de Trump sirven de gu?a, se le escuchar? hablar repetidamente de la frontera y de inmigraci?n, una cuesti?n donde su discurso pasa sin base f?ctica por asegurar que la mayor?a de quienes llegan sin papeles a EEUU son criminales o enfermos mentales y a vincularlos a un aumento del crimen violento en EEUU.

Se anticipa también que explotar? el palpable sentir mayoritario de descontento de los estadounidenses con la inflaci?n para atacar a Biden, y que incidir? en que, durante el mandato del dem?crata, EEUU se ha visto involucrado tanto la guerra en Ucrania como la de Israel en Gaza.

El dem?crata, por su parte, enfrenta el reto de defender sus pol?ticas econ?micas, que han llevado a la econom?a estadounidense a una situaci?n de crecimiento, sin minimizar que la frustraci?n de la poblaci?n por el alza de precios es una realidad. En este terreno la propuesta de Trump de imponer aranceles del 10% a todas las importaciones, una medida que se anticipa a?n m?s inflacionaria, abrir? a Biden una v?a de escape y ataque.

Se espera que el dem?crata se?ale también a Trump por el retroceso de los derechos reproductivos, recrudecido desde que el Tribunal Supremo con una supermayor?a conservadora asegurada con tres jueces nombrados por el republicano derog? hace dos a?os la protecci?n constitucional del derecho al aborto.

Ser? su papel, asimismo, despertar a muchos votantes de la notable amnesia que muestran sobre el caos que se vivi? durante la Administraci?n de Trump, del abismo al que asom? a la democracia estadounidense con sus intentos de revertir los resultados leg?timos de las elecciones y de la radical agenda que el republicano ha planteado para su potencial segundo mandato.

4.Los interrogantes y el juego de expectativas

Hay otros temas que van m?s all? de agenda o programa que hacen del debate un momento impredecible y trascendental y también lleno de interrogantes. ?Aparecer? el Trump m?s medido del segundo debate de 2020 o el que hizo del primero entonces un espect?culo bochornoso? ?Hasta qué punto renovar? sus ataques a los resultados de 2020? ?Explotar? la reciente condena a Hunter Biden, el hijo del presidente, cuando él mismo llega con la condena en Nueva York?

No hay, no obstante, nada posiblemente m?s significativo que el juicio que el debate ayudar? a hacer a los estadounidenses sobre el estado f?sico y mental de Biden a sus 81 a?os, una cuesti?n que, m?s all? de v?deos manipulados y de ataques de los republicanos subrayando su supuesto declive, provoca auténtica ansiedad entre muchos dem?cratas.

La confianza del equipo de Biden es que el presidente, como en otras ocasiones importantes como el discurso sobre el estado de la Uni?n, tenga una actuaci?n vigorosa que contribuya a disipar las dudas. Cualquier desliz o momentos inc?modos, por el contrario, dar?an combustible a los ataques y tendr?an garantizada una explotaci?n viral.

Trump ha llegado a decir que Biden aparecer? "todo colocado", implicando abierta o t?citamente que recibe "suplementos" o, directamente, "drogas" (en un mitin el s?bado pasado dijo que le pondr?an "una inyecci?n en el culo" y frecuentemente en sus actos ha llegado a vincularlo con coca?na que se encontr? en la Casa Blanca). Pero el republicano también ha empezado a modular su mensaje para moderar las expectativas sobre una mala actuaci?n de Biden. De insultarlo como alguien que "no puede unir dos frases" y de mofas ha pasado a asumir p?blicamente que "ser? un debatiente digno" y recientemente en un podcast dijo: "no quiero subestimarlo".

5.Sin precedentes

El debate marca hitos en muchos aspectos, y no solo por la avanzada edad de los candidatos o por el hecho de que Trump llegue como un criminal convicto.

Nunca antes se hab?a celebrado tan temprano un debate en una carrera presidencial y ni Trump ni Biden son, de hecho, los candidatos oficiales. Aunque ambos aseguraron sus triunfos en primarias ya en marzo, sus nominaciones no se ratificar?n hasta las convenciones de sus respectivos partidos. La republicana tiene lugar en Milwaukee (Wisconsin) entre el 15 y el 18 de julio y la dem?crata en Chicago (Illinois) entre el 19 y el 22 de agosto.

Prescindiendo de la Comisi?n de Debates Presidenciales, que queda fuera de la organizaci?n por primera vez desde 1988, los candidatos han pactado dos encuentros: este primero organizado por CNN y un segundo organizado por la cadena ABC que est? previsto para el 10 de septiembre. La campa?a de Biden ha argumentado que realizar uno en junio, en lugar de como era tradicional en septiembre y octubre, tiene sentido para presentar las propuestas a los votantes antes de que se inicie el voto anticipado.

6.Los preparativos

Biden se ha preparado concienzudamente para el debate. Ha pasado siete d?as rodeado de un amplio equipo de al menos 16 asesores y aliados en Camp David, donde se han habilitado un hangar y una sala de proyecciones para ensayos y donde su abogado personal, Bob Bauer, como en 2020, ha desempe?ado el papel de Trump.

El republicano, por su parte, ha vuelto a eludir esas preparaciones cl?sicas y se ha estado curtiendo en m?tines, aunque los dos ?ltimos d?as los ha pasado en su residencia en Mar-a-Lago, en Florida, manteniendo discusiones preparatorias con aliados. Entre ellos ha estado Kellyanne Conway, con la que ha preparado especialmente la cuesti?n de los derechos reproductivos que hasta ahora se ha mostrado como un elemento movilizador favorable a los dem?cratas. También los senadores Marco Rubio y JD Vance, dos de los nombres que suenan en las quinielas sobre quién elegir? como vicepresidente en su candidatura.



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