Una soga de unos 17 metros de longitud y elaborada con jirones de colchas ha aparecido en un registro al que fue sometida este martes la prisi?n barcelonesa de Wad-Ras, después de que sus funcionarios abortaran un intento de fuga de ?ngela Dobrowolski, exmujer del productor televisivo Josep Mar?a Mainat.

La soga, del mismo color anaranjado que las mantas ligeras de las camas de la prisi?n, est? realizada con pedazos de tela anudados firmemente entre s?. La propiedad de esa cuerda no se ha atribuido a?n, pero ha aparecido escondida en unas bolsas colocadas bajo unos jaulones de transporte de comida y otros suministros en la escalera de servicio del Centre Penitenciari de Dones, confirman a EL PERI?DICO fuentes penitenciarias.

La expareja del fundador de La Trinca ten?a encomendada la limpieza de esa escalera. En el tercer piso est? la ventana con un viejo enrejado de acero que la interna estaba rompiendo poco a poco. Ya ten?a practicado un boquete de unos 30 cent?metros la tarde del pasado viernes, cuando fue sorprendida destrenzando el enrejado. Por la altura de esa zona, para salir de la prisi?n se habr?a necesitado una escalera o una soga. La fuga tal como estaba planteada es considerada "imposible" por las autoridades de Prisiones de Catalunya.

Dos hierros

Toda la c?rcel barcelonesa fue sometida este martes a un cacheo general, un registro a fondo de las celdas en el que han aparecido también dos elementos met?licos que podr?an haber servido de herramienta a la exesposa de Mainat para hacer palanca con la reja, estiman las mismas fuentes.

Uno de los dos elementos met?licos estaba en la misma bolsa que congen?a la soga rudimentaria. El otro, en otras bolsas de un ?rea de basuras. Los dos hierros han sido arrancados de los soportes de sillas del aula de Inform?tica.

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A la izquierda, dos de los alambres de acero que hab?a conseguido arrancar ?ngela Dobrowolski en la ventana de la prisi?n, a la derecha.
El Peri?dico
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El hallazgo forma parte ya del informe abierto en la c?rcel barcelonesa de mujeres por el intento de fuga de ?ngela Dobrowolski, a quien, de ser juzgada por este asunto, podr?an caerle entre seis meses y un a?o de c?rcel adicional.

Buscando la muerte

Desde el pasado viernes, cuando fue sorprendida rompiendo una enrejado, ?ngela Dobrowolski ha sostenido ante las autoridades del Centre Penitenciari de Dones que su intenci?n al abrir el boquete de la ventana no era fugarse, sino suicidarse. Esta versi?n ha sido confirmada a este diario por el actual abogado de la presa.

La presa, recientemente convertida al Islam, guarda un vers?culo del Cor?n que habla del paso al para?so de los m?rtires. Es uno de los vers?culos que también recitan los yihadistas suicidas.

Dobrowolski ha contado que buscaba la muerte ante el penoso horizonte penal que se le presenta por delante. Tiene 21 causas abiertas, pero la m?s pr?xima en el calendario es la que se ha instruido por el plan para asesinar a su expareja.

El d?a 15 de julio comienza una vista de cinco d?as de duraci?n por dos delitos que se le atribuyen: uno de revelaci?n de secretos, por el que la fiscal?a pide tres a?os de prisi?n y la acusaci?n particular un a?o; y otro por la tentativa de asesinato, por el que fiscal y acusaci?n particular -su ex- piden 13 a?os de c?rcel.

La ley establece un l?mite de cumplimiento de prisi?n del triple de la mayor de las penas a las que haya sido condenada una persona, con l?mite de 20 a?os, por lo que ante ?ngela Dobrowolski se presenta una posible estancia en la c?rcel de al menos cuatro lustros.

Actualmente, la mujer cumple una condena de dos a?os y cuatro meses por la falsificaci?n de cheques de su exmarido. La pasada semana le fue comunicado otro a?o de condena por quebrantamiento de una orden de alejamiento el d?a de la madre de 2023, antes de ingresar en prisi?n, el pasado verano. La noticia contrari? mucho a la afectada.

Vigilada

?ngela Dobrowolski ha comunicado a los vigilantes de la prisi?n que inicia una huelga de hambre. Lleva, confirma su abogado, tres d?as consumiendo solo agua y café. En repetidas ocasiones, recuerda el letrado, ha afirmado que no aguanta la c?rcel. “Yo en prisi?n me mato”, le ha dicho.

Actualmente se le aplica el art?culo 75 del Reglamento Penitenciario, que limita los movimientos del preso en el interior de la prisi?n. Dobrowolski ha sido realojada en otra celda, no est? nunca sola y se le ha retirado el trabajo que ten?a asignado.

Una petici?n de suspensi?n extraordinaria de la condena se present? en vano a comienzos de a?o: tendr? que seguir en la prisi?n, y no fuera, un tratamiento para dejar las drogas que consume desde hace a?os. Por su adicci?n, la interna ha sido sometida dos veces a ex?menes médicos forenses.



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