Dos d?as tard? la Autoridad Portuaria en alertar a la Polic?a Nacional del hallazgo el 30 de mayo del pasado a?o de un hueso aparentemente humano durante las obras de demolici?n del viejo pantal?n del Puerto de Sagunto. El fragmento del fémur derecho de Loli Paul Sesé, como as? han confirmado finalmente las pruebas de ADN, la mujer de 57 a?os que desapareci? la Noche de San Juan de 2019 tras ser vista por ?ltima vez cuando iba junto a su compa?ero sentimental portando un carro con maderas, rumbo a la playa para celebrar la m?gica noche con unos amigos, como as? le hizo saber a un testigo que se cruz? con ella.

Los numerosos indicios recabados por los investigadores del grupo de Homicidios de Valencia, y por agentes de la UFAM de Sagunt inicialmente, han llevado a que tres hombres figuren como investigados por su presunta implicaci?n en el crimen de Loli, como inform? en exclusiva Levante-EMV, del mismo grupo editorial. Entre ellos est? el principal sospechoso desde el minuto cero de su desaparici?n, Francisco L. G., pareja de la mujer presuntamente asesinada, con antecedentes por violencia machistasobre ella y con una orden de alejamiento en vigor en ese momento.

Ni los propios responsables de la obra de motu propio, ni la polic?a y tampoco v?a judicial. Nadie orden? paralizar las obras después de que el encargado de la cuba de agua hallara el citado fémur mientras retiraba el material del suelo. Lo atribuy? a que hab?a ca?do por el hueco del filtrado de una m?quina trituradora, con capacidad para cuatro metros c?bicos. Y lo retir? para que no fuera pisado.

El técnico de prevenci?n de las obras, que declar? a principios de esta semana ante el juzgado de Instrucci?n n?mero cinco de Sagunto, encargado del caso, pudo concretar el punto donde fue hallado el hueso pero no fue capaz de establecer la trazabilidad de la procedencia del mismo. En la trituradora se machacaba el hormig?n del propio pantal?n, as? como otro material y tierra de la obra, como un peque?o talud situado en la pared trasera de la nave abandonada en la que hab?a trabajado de joven el principal investigado, situada a escasos metros.

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Obras de demolici?n del viejo pantal?n antes del hallazgo del fémur.
Daniel Tortajada
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La letrada Gala Carratal?, que ejerce la acusaci?n particular en representaci?n de la menor de las tres hijas de Loli, quien denunci? su desaparici?n el 4 de septiembre, solicit? la declaraci?n de este testigo y del operario que hall? el fémur precisamente para aclarar las contradicciones sobre el lugar del hallazgo del hueso.

Las hijas de Loli no se explican por qué las obras no se paralizaron en ese mismo momento. "No sé c?mo una obra de esas dimensiones ante un hallazgo de un hueso humano no se para y se ponen a buscar el resto del cuerpo". Adem?s, consideran que analizando las declaraciones de los testigos "es algo obvio" que uno de los puntos donde se tendr?a que haber buscado a su madre es precisamente el pantal?n, donde fue encontrado el citado fémur derecho. Cuya parte inferior, a unos pasos de la arena, era utilizado como vertedero por unos, y picadero por otros, al poder entrar hasta all? con el coche.

Las hijas de Loli se resisten a resignarse a que jam?s encontrar?n el resto del cuerpo de su madre, que los indicios apuntan que habr?a quedado bajo capas de cemento y asfalto en el nuevo pantal?n. "Si hace falta voy yo con una pala, me hace da?o pensar que mi madre sigue en la zona de la playa bajo una obra".



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